El sur también existe (para los negocios)
Incentivado por el moderado éxito de las elecciones porteñas, el Gobierno de la ciudad provee de abundantes recursos a una nueva sede –alquilada– en Parque Lezama, para realojar cuatro ministerios de su dependencia.
Espacio Público, Desarrollo Urbano, Modernización y Desarrollo Económico se mudan el mes que viene. El Gobierno porteño ha alquilado a razón de unos 66 millones de pesos anuales el viejo edificio Canale, ubicado frente al Parque Lezama y lo ha reacondicionado ostentosamente como si se tratara de algo de su propiedad.
El reparto de la torta de “amistosas” obras de adecuación comienza con un par de licitaciones –52,8 millones para obras civiles y 43,1 millones para instalaciones eléctricas– adjudicadas al amigazo del Jefe de Gobierno don Nicolás Caputo –SES Constructora–, un habitué entre los mayores contratistas de la obra pública porteña.
El bueno de Larreta, a la sazón jefe electo de la ciudad, abogando por la transparencia, contrató un servicio de limpieza en la módica suma de 25 millones. Mientras que Daniel Chain, a cargo de Desarrollo Urbano, contrató en forma directa a Muresco para reconstruir el piso –5 millones y medio– y le pagará a CA Group 4 millones y medio para instalar el aire acondicionado.
En cuanto a la seguridad privada se oblarán 750 mil pesos y por el montaje de un sistema de video vigilancia se agregan otros 2,3 millones.
El Ministerio de Modernización, a su vez, tuvo necesidad de modificar una partida presupuestaria para arrimarle unos 8 millones de pesos a la Agencia de Sistemas de Información dedicados a “gastos de reacondicionamiento del Palacio Lezama”, que así se llama el nuevo bulín del Gobierno porteño. La Agencia de Sistemas de Información (ASI), según su propia definición tiene como objetivo “organizar y coordinar con todas las dependencias del Poder Ejecutivo, la infraestructura informática de telecomunicaciones y de los sistemas de información, dotando a la Ciudad de un plan autosuficiente, razonable y coordinado de gobierno electrónico, que permita el acceso del ciudadano por medios electrónicos y telefónicos a los servicios de información de gobierno, aportando transparencia a la gestión”.
De aquellos 80 millones anunciados hace un año como gastos de adecuación del edificio, ya se llevan invertidos casi 120 –un 50% de recargo– porcentuales en los que Macri suele incurrir cuando se le ocurre aumentar el subte o el ABL con absoluto descaro.
Lo cierto es que no se necesita un expertise analítico para formular varios interrogantes:
*¿Era necesaria esta mudanza con un Palacio de gobierno casi deshabitado a raíz del traslado a la sede de Uspallata?
*De ser así ¿por qué a un lugar alquilado?
*De convenir el alquiler ¿por qué por tres años y no los cuatro del mandato?
*Con una inversión –hasta ahora– de 120 millones, se firmó una prórroga que contemple la valorización aportada? Más simple ¿Se firmó una prórroga potencial?
Los datos fueron extraídos de: http://www.buenosaires.gob.ar/bweb/search?keys=licitaciones%20y%20compras&facet_type=